viernes, 1 de junio de 2012

EL MURMULLO DE LAS COSAS





IDEAL

  La promesa y el orgullo: -estilos de la vergüenza-.










CÓDIGO NOCTURNO

¿Qué le dice las paredes al llanto y qué las nubes a los zamuros?
La resaca es una fiesta siempre de viaje.

Murmullos están donde quiera
Aguzar la pira de la duda
En medio del silencio cuando te rodean
Como fieras la gente del comercio


Oye el crujido del follaje
Oye el aleteo de las luciérnagas
Un mensaje mudo dejan a su paso
Descifra el augurio de tu venganza
Cuando canta la chicharra avisando nuevas vertientes
Y otros muslos aceitosos

No olvides aquella noche que quedaste sin labios
Y al escuchar el llanto de la lechuza otro vientre tibio te dio de beber 









FESTÍN  DIVINO


I - En el día  

Estaba el águila sentada a la puerta de un prostíbulo,
El farolito de Gardel empezaba la función


Un ángel mudo descendió de las alturas
Fumaba la pipa y su atuendo intimidaba a los transeúntes
(dijo pavese que el que fuma la pipa no traiciona) ¡Veamos!


Pasó un auto veloz dejando el eco de un reggaetón,
Votó una corona de espinas


El padre daba la misa y un borrachito vomitaba
La puerta de la iglesia. Después se puso a leer unos versos inaudibles   




                    II- En la noche

El ángel ya no era mudo,
Se metió al burdel, folló todas las mujeres,
Las dejó extenuadas y les puso un rock estridente


El cura escuchaba  los tangos de Gardel,
Corrió a todos de la misa,
Se fue huyendo en un auto y colocó la corona de espinas al águila:
Los feligreses querían el rezo y pusieron su reggaetón,
El tango ya no era la moda


Voló por los aires el borrachito vomitón
Junto a su águila mitológica cervecera,
Fumaba su pipa a fuego inextinguible y le colgaba una pantaleta ensangrentada,
Era el jefazo mayor de la obra
Que bajó de los cielos a divertirse
Ya que el mismo edén lo habían tomado por asalto 
















DEBERÍA

¡Debería! Es un término que hiede a depresión
  En la tinta del psiquiatra,
 Pero la muerte no debería vestirse de la vida
  O el vivir de la ilusión

Constreñir los instantes
 Vaciar la osadía y zumbársela a los cultos 
  de la estúpida igualdad
                  


 Desangrar los sangrones del poder
 Erigir cementerios para perros,
 Darse cuenta que las santas y las putas tienen asco de vivir
 -que nos contagien  el convento y el burdel-.
 Levantar palacios de meditación con un solo cubículo
  Recordar cada día que la obra es el rescate de la muerte

                
                   Hay tanto deber que no podemos asumir


















EL VICIO DE LA CULTURA

Libertad: La plaga del regionalismo y el plástico de la urbe












BUENA CONDUCTA

Llenar de hinojos las miradas que se cruzan
          Emparentar la gloria al fuego de lo prohibido
             Despreciar al muy escolástico
                  Reír un poco sepultando todo lo que se repite
                        Añorar la primera bomba en sur América
                                 Y al fin olvidar la lucidez de esta pobreza